Conceiçao, Roberto, Pelé, Diogo, Di Santo y Zucca. |
Allá por los años 60 resultaban habituales las giras amistosas del Santos FC del “Rey” Pelé, para medirse con los principales equipos del mundo, como el Real Madrid, el Barcelona, la Juventus, el Inter o el Feyenoord, por poner algunos ejemplos.
1961 es el año de la primera gira del Santos con Pelé por Argentina. Pero ese año Newell's Old Boys -tras sufrir el único descenso de su historia- militaba en la segunda división de AFA, por lo que el sueño de traer a "O Rei" a Rosario parecía improbable de concretar. La gestión era difícil, pero no imposible para el dirigente rojinegro Juan Bautista Busso.
Si bien su cargo era el de vocal de la Comisión Directiva, sus contactos en el mundo dirigencial y empresarial -junto a la audacia personal que lo caracterizaba- lo catapultaron como uno de los principales dirigentes del club. A partir de sus gestiones, Newell’s (aun estando en Primera B) sacudió el mercado de pases contratando en 1961 a una serie de jugadores brasileños que pronto quedarían en la memoria histórica de la institución. Eran los años del denominado “fútbol espectáculo”.
En ese contexto, acordar la llegada de Pelé parecía una misión imposible. Entre muchos cundía el escepticismo, pero Busso encaró la negociación personalmente y despejó todas las dudas redoblando la apuesta: si la movida resultaba un fracaso, él absorbería las pérdidas. Si el proyecto era un éxito, Newell's se quedaría con el rédito económico…
Busso confiaba ciegamente en el poder de convocatoria de la hinchada rojinegra... Así fue que el 1 de octubre de 1961 el viejo estadio del Parque Independencia se llenó de bote a bote una vez más, para asistir al empate entre el local y el Santos FC. Tres días antes los brasileños habían jugado el primer partido de su gira frente a Racing, que meses más tarde sería campeón argentino (fue victoria del Santos por 4 a 2).
Pero en Rosario la cosa fue distinta. En un partido parejo, abrió el marcador el propio Pelé a los 10’. Pero luego no logró deslumbrar, asediado por la férrea marca de Pedro De Ciancio. Finalmente, a los 34’ del ST Newell’s (dirigido por el eterno Adolfo Celli) alcanzó la igualdad a través de un cabezazo del brasileño Diogo.
La recaudación fue de casi 2 millones de pesos de aquella época, demostrando una vez más la popularidad de Newell's Old Boys, que pronto lograría el ascenso, luego anulado por un decreto de AFA. Pero eso ya es otra historia…
Rubén Chiavazza (nieto del histórico fotógrafo Joaquín Chiavazza) le obsequia a Pelé un banderín leproso. |
Coloraciones: Cuna de Ases.
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